Autoridades de México detuvieron a tres bengalíes y ocho mexicanos acusados de integrar una red internacional de tráfico de personas desde países asiáticos y africanos a Estados Unidos, informó este lunes la Procuraduría General de la República (PGR).
Además de las detenciones, en la operación “se rescataron 13 indocumentados: dos de India, cinco de Bangladesh y seis de Nepal” a quienes los presuntos traficantes “mantenían en condiciones insalubres”, señaló la PGR en un comunicado.
La red de la que formarían parte los 11 detenidos se dedicaba a facilitar el traslado y entrada ilegal a Estados Unidos de personas “principalmente de nacionalidad afgana, bengalíes, indios, iraníes, paquistaníes y somalíes”, señaló la dependencia.
Los indocumentados eran trasladados primero a Dubai y después a Centroamérica, desde donde ingresaban clandestinamente a México por la región de Chiapas (sureste), fronteriza con Guatemala, explicó.
Desde Chiapas, los indocumentados viajaban vía aérea o terrestre a Ciudad de México para después ser llevados a la región de Tamaulipas (noreste) y facilitarles cruzar la frontera a Texas.
Los detenidos fueron primero puestos en detención provisional el 19 de febrero y después encarcelados en dos penales por los delitos de delincuencia organizada y tráfico de indocumentados, señaló la fiscalía.
Otra persona que había sido detenida en la operación quedó en libertad por falta de pruebas.
Unos 140 mil extranjeros ingresan cada año de manera ilegal a México intentando llegar a territorio estadounidense, de acuerdo con estimaciones oficiales.
La mayoría de los indocumentados son centroamericanos, pero cada vez se conocen más casos de inmigrantes provenientes de Asia.
Algunos de ellos pagan a “polleros” (traficantes) para que los guíen en su ruta clandestina y muchos son víctimas de robo, extorsión, violación, trata, secuestro y asesinato por parte de miembros del crimen organizado, así como de abusos por parte de autoridades.
AFP